“Tiene muchas posibilidades de ser gobernador de la provincia. Pero tiene que ir a la interna”, expresó días atrás Daniel Scioli en referencia a quien hace unos meses podría haberse definido como su indudable carta a jugar en territorio bonaerense en 2015: Martín Insaurralde. Sucede que corrió mucha agua debajo del puente y ahora el ex motonauta, a pesar de seguir observando en “MI” a un buen competidor para su escudería, ya no lo considera como el piloto Nº 1 indiscutible para lanzar a la carrera por la Gobernación.
Y es que el lomense demostró tener su propio juego, que está basado en erigir su imagen en dos frentes: el mediático y el político, aunque en ambos implementa la misma estrategia: el chichoneo. Para “Doña Rosa” la figura de Insaurralde comenzó a serle familiar hace dos años a partir de su aparición en las revistas del corazón y el programa de Marcelo Tinelli en medio de un supuesto romance con la actriz Florencia Peña. Al año siguiente, y ya instalado como el candidato del kirchnerismo en la Provincia, siguió poblando las páginas de la sección “Espectáculos” con el acercamiento a la modelo Jesica Cirio, quien luego se transformó oficialmente en su pareja, con la que sigue ligado por estos días.
Pero el romanticismo del diputado no se reduce en los acaramelados besos televisivos con su novia, sino que también el coqueteo se hace visible en la esfera política. Desde su decisión de estar presente el pasado 25 de mayo en Tigre en un evento poblado por la troupe massista y no asistir al acto de CFK, las versiones de pase al Frente Renovador son constantes. “Es inminente la llegada de Martín”, deslizaron esta semana a NOVA voces cercanas al FR en la Legislatura provincial, al tiempo que resaltan la excelente relación personal entre “MI” y “+a”.
En este contexto, el intendente de Lomas de Zamora en uso de licencia permanece dejando entreabierta la puerta de las suspicacias, a la búsqueda de posicionarse como un candidato deseado, más aún con el viento a favor que le otorgan las últimas encuestas. Pero el gobernador bonaerense empezó a dar señas de fastidio.
La expresión “pero tiene que ir a internas” no es casual, sino que, con esto, Scioli le dejó en claro a Insaurralde que, aunque le sea de utilidad para darle fuerza a su “Ola Naranja”, tampoco va a estar esperando el compromiso total del lomense tal como si fuese una novia abandonada en la eterna expectativa por el retorno del enamorado. En calle 6 saben que, si no aparece el príncipe azul, hay que empezar a maquillar sapos.
De esta manera, varios nombres comenzaron a rondar la mesa chica del sciolismo, rastreando la alternativa que mejor cuaje a nivel provincial con la impronta que se le ha dado a la candidatura presidencial de D.O.S. Entre los más recientes, aparece Santiago Montoya. El ex “recaudador” de ARBA y actual cabeza del Grupo Provincia ya puso de manifiesto sus aspiraciones a la Gobernación, hasta anunciando a quien sería su compañero de fórmula: el hermano del gobernador, Nicolás Scioli.
Así, el cordobés se ha mostrado muy cerca del mandatario bonaerense en las últimas semanas, teniendo la venia para empezar a recorrer la Provincia con la chapa de ser un “naranja puro”. Sin embargo, necesita un mayor rodaje para imponer su figura sobre la de otros que también suenan como posibles competidores internos pero que si inclinan más hacia el kirchnerismo.
En ese último lote se encuentra Diego Bossio. El tandilense, titular de ANSES, ya viene recorriendo varios distritos bonaerenses con netbooks y certificados de escrituras del Procrear bajo el brazo, recalcando por cuanto micrófono encuentra su “amor” por la Provincia. Aunque, con este funcionario, Scioli también habría mantenido reuniones de carácter político.
Por otro lado, sin desoír los deseos de quienes quieren a un candidato que sea intendente, Scioli ha elogiado recientemente a otro de los aspirantes a sucederlo: el jefe comunal de Berazategui, Juan Patricio Mussi. “El proyecto de desarrollo de Berazategui es un gran modelo”, señaló el gobernador ante la atenta mirada del mandatario municipal, que ya se ha mencionado como uno de los posibles candidatos a la Gobernación, impulsado por el grupo de jóvenes intendentes K “Los octubres”.
Asimismo, se habla de un hombre que ya ha declarado su intención de ir por el sillón de calle 6 y que, a pesar de su grado de desconocimiento, cuenta con una importante llave mediática que podría resolver de inmediato ese escollo: se trata del intendente de Bolivar, Eduardo “Bali” Bucca, quien es amigo de Marcelo Tinelli, conductor que ya lo ha mencionado en su programa como uno de los aspirantes.
De todos modos, en el armado naranja no terminan de cerrar esos nombres y algunos se han animado a buscar dentro del propio gabinete. Así, y tal como lo señaló NOVA meses atrás, no se descarta la posibilidad de “medir” al ministro de Seguridad, Alejandro Granados, bajo el argumento de que una mejora en el panorama delictivo el año próximo, cuando se arrojen resultados más concretos de la emergencia, puede derivar en un posicionamiento fuerte de la imagen del hombre de Ezeiza.
Más allá de esto, en los últimos días surgió un aspecto que podría abortar el desembarco de Insaurralde al FR. Sucede que Massa, quien estaba preocupado al no tener un candidato que mida en las encuestas (razón fundamental de su coqueteo con “MI”), ha visto con optimismo la performance en los recientes sondeos de Felipe Solá, quien, de paso, marcó territorio de entrada: “No entiendo esto de crecer mostrando una novia, Insaurralde nunca está para trabajar”, castigó el ex gobernador.
Así, Scioli aún no descarta a Insaurralde, aunque empezó a deshojar la margarita más rápido para saber si finalmente lo quiere o no lo quiere y definir lo antes posible un equipo sólido de cara a 2015.
Fuente: NOVA
