Son un sistema de valles y montañas que se encuentran en el noroeste argentino, se extienden por 520 kilómetros de norte a sur por las provincias de Salta, Tucumán y Catamarca.

Están considerados entre los destinos más bellos del país. Es el sitio donde se asentaron los indios calchaquíes, dando origen al desarrollo de una variedad cultural.

Su nombre proviene del calchaquí, cultura indígena que estuvo en guerra durante aproximadamente 100 años con invasores españoles, conocida como las Guerras Calchaquíes, iniciadas en 1562 por su jefe militar Juan Calchaquí.

En esta zona pueden realizarse diferentes actividades turísticas, como la visita a bodegas en especial en la zona de Cafayate y San Carlos, donde se dan visitas guiadas sobre el proceso de producción y degustaciones. Además estos valles son el lugar ideal para realizar trekking y montañismo, donde hay casi 6 mil metros de altura.

En caso de querer realizar actividades en familia, pueden hacerse cabalgatas que combinan la naturaleza con la visita de pueblos de montaña, avistajes de aves, degustaciones, todo al aire libre. Además, los guías locales también ofrecen, travesías de varios días en 4x4 llegan hasta la Puna.

La región es un tesoro arqueológico de las culturas prehispánicas, sitio en donde la civilización diaguita calchaquí predominó varios siglos hasta la opresión y avasallamiento del hombre blanco, en los valles se encuentras importantes ruinas como las Quilmes, Condorhuasi o Tastil, todas ellas pueden ser visitadas y aprender de ellas en los museos de la zona.  

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