CAPITAL FEDERAL, Junio 08 (www.ArecoCiudad.com.ar) La diputada nacional y presidenta de la Comisión de Acción Social y Salud Pública, María Elena Chieno dialogó con el equipo del programa radial de BerissoCiudad sobre la aprobación de la Ley Nacional de Fertilización Asistida.

“Es un orgullo para mí y para todo el grupo de diputados de todos los bloques que formamos parte de la Comisión, haber logrado sacar esta ley. Hace aproximadamente 20 años que vienen presentándose proyectos de distintos bloques y características”, comenzó.

“Yo ingresé a la Cámara en 2009, durante los dos años siguientes tuvimos en tratamiento alrededor de 10 proyectos, de esos habíamos logrado elaborar un dictamen unificando criterios, pero era una ley más su reglamentación, era muy extensa, de más de 40 artículos, con muchos detalles. Por lo tanto era bastante complejo conseguir consenso”, expuso.

Luego, comentó: “el 30 de noviembre del 2011 quedamos con una gran frustración porque luego de más de 12 horas de debate no se logró sacar la ley. Pero en 2012 retomamos la tarea y decidimos encarar desde otro ángulo”.

“La necesidad de la ley seguía existiendo, las organizaciones sociales estaban cada vez más ansiosas y nos ayudaban sensibilizando a todos los legisladores y las distintas instancias gubernamentales”, recordó la diputada.

“En ese momento aparecieron un par de leyes provinciales, aprobando la ley en forma previa a la nacional, con lo que tuvimos más impulso y nos permitió ver que se podía llevar a cabo aunque fuese parcialmente desde una provincia cubrir este tipo de tratamientos”, indicó.

Y siguió contando: “entonces decidimos hacer una ley más acotada, de 10 artículos en donde diéramos el marco legal general para el país y que después la reglamentación se encargara de cada provincia de acuerdo a sus propias posibilidades ya que la salud es una de las funciones que las provincias no han delegado en la Nación”.

“Hicimos una ley marco, a la que el año pasado le dimos media sanción. Fue al Senado, que la estudió y le modificó poquitas cosas, nos hizo algunos agregados pero no cambió el espíritu de esa ley que habíamos pensado como posible y la recibimos hace menos de un mes, con las modificaciones y aprobada por el Senado. No nos quedaba más que aceptarlas”, asumió.

“La sometimos en la primera sesión de tablas que tuvimos, la del último miércoles y fue ampliamente apoyada con 204 votos a favor, 9 abstenciones y 1 voto en contra”, informó Chieno.

“Estamos muy satisfechos de haber podido cumplir con esto que es un deseo de gran parte de la sociedad y que todos sabemos que hace falta y que es causal de una gran inequidad, una injusticia, porque aquellos que tienen dinero para pagar éste tipo de tratamientos lo han podido hacer y las personas que no cuentan con ese dinero se ven ante una frustración muy grande”, explicó.

“Existiendo en la ciencia la posibilidad de ayudar a las familias a intentar ser padres, ellos no podían acceder. Con ésta ley, todas las personas, sin importar su orientación sexual, su estado civil, podrán tener la posibilidad de intentar ser padres”, aseguró.

Y continuó: “todos tenemos algún conocido que pasa por ésta circunstancia. Sabemos el sacrificio que es poder llegar a uno o dos intentos. Hay gente que hasta ha hipotecado sus casas o las han vendido para obtener los fondos”.

Asimismo, relató que “en entrevistas anteriores me dio vergüenza ajena cuando me preguntaban qué pasará ahora con las prepagas, como si eso fuera lo más importante. Las prepagas cubren la asistencia de no más del 6 % del total de la población, por eso yo estoy más preocupada por las provincias, en donde entre hospitales públicos y las obras sociales provinciales cubren casi al 70 % de la población”.

“Las prepagas tienen un universo de usuarios que realmente son los más pudientes del país, es gente que puede hacer frente a esto. Están ofreciendo a sus usuarios una operación estética por año, entonces bien pueden hacerse cargo de cubrir estos tratamientos, porque no son los más caros”, afirmó la diputada nacional.

Y remató diciendo que “la mayoría de estos tratamientos son de bajo costo, los más sencillos: el 10 % del total de las personas que necesitan fertilidad asistida, son los que requieren tratamientos de alto costo y complejidad científica”.

“Mi lucha siempre fue conseguir leyes que pudieran regular esto de poder planificar la familia y de lograr la Ley de Anticonceptivos que ya lleva 10 años, para que pudiéramos hacer anticoncepción quirúrgica. Yo soy médica y puedo testificar que hacíamos malabares para que un juez autorizara a una pobre mujer que tenía 12 o 15 hijos hacerse una ligadura de trompas”, narró.

Y confesó: “nos han amenazado con meternos presos, la iglesia nos sacaba carteles en todo el pueblo porque estábamos haciendo ligaduras de trompas, una cosa terrible. Ahora nos quedaba ésta otra cara de la moneda, la de las familias que no pueden tener hijos y deambulan buscando ayuda en todas partes”.

Finalmente consideró que “los verdaderos protagonistas de esto han sido las organizaciones sociales, que nos han ayudado, enseñado y sensibilizado sobre la frustración que muchas veces provoca ver en las pantallas de televisión a los ricos y famosos paseándose con sus hijitos productos de la fertilización asistida y ellos no podían acceder a estas técnicas”. (www.ArecoCiudad.com.ar)