Fuente: Agencia NOVA
Sergio Massa empezó a despejar el camino de su recorrido electoral y dejó varias definiciones en la presentación de los candidatos de la lista del Frente Renovador. El tigrense anunció que su espacio no apoyará ninguna reforma constitucional ni re-reelección alguna y que, para asegurarlo, sellarán su compromiso en un documento que establezca que, en caso de actuar de forma contraría, deberán renunciar a sus bancas.
Fue acaso la definición más efectista de la noche, aunque la nueva estrella del firmamento bonaerense no se privó de hablar de inflación, inseguridad, Corte Suprema y descentralización.
Massa reunió a su tropa bonaerense este lunes por la tarde en el Museo del Arte de Tigre, en un acto al aire libre que pudo haber sido interesante en otro período del año. Es que el sufrimiento del público por la baja temperatura fue notorio. La organización tuvo aires de cierre de campaña: shows en vivo, pantalla gigante, música a un volumen tan alto que impedía hablar, carpas VIP’s y sectorización de los asistentes.
Los candidatos, con Darío Giustozzi a la cabeza, fueron presentados de a uno y se acomodaron a un costado del escenario. Antes de la aparición del alcalde se exhibió un video con imágenes de la gestión. De traje gris, Massa apareció acompañado de un tema de Coldplay. El mensaje: la esperanza.
No huno ninguna referencia al kirchnerismo ni a la presidenta Cristina Kirchner. Tampoco a la oposición. Massa inició su discurso con un fuerte raigambre familiar, pasó a la gestión y terminó con algunas definiciones políticas que alimentarán el debate mediático en los próximos días.
El líder del Frente Renovador señaló que a los intendentes que lo acompañan los unió “mirar los problemas de la misma manera”, y extendió el agradecimiento al radicalismo, al Pro y al peronismo. Definió al espacio como “independiente, fresco y con caras nuevas”.
Lo aplaudían y vivaban un conjunto heterogéneo de alcaldes bonaerenses y candidatos seccionales y municipales. Massa destacó la “diversidad” de su sector y, en un claro gesto de diferenciación del estilo de Cristina Kirchner, adelantó que no pedirán a nadie “que piense exactamente igual”.
Lanzado ya a la campaña, dijo que el Frente Renovador representa a la clase media, los trabajados –“expresados en las cuatro centrales obreras”, recalcó-, el campo y la industria. Y se permitió citar al Papa Francisco: “En la concordia está el futuro de la Argentina”.
Sin embargo no todos fueron cuestionamientos velados a la Casa Rosada. Sergio Massa defendió la Asignación Universal por Hijo -que representa “al Estado interviniendo en la distribución del ingreso”-, la movilidad jubilatoria -de la que fue uno de los impulsores durante su paso por la Anses-, y la política de Derechos Humanos, que “clausuró una etapa negra en la historia argentina”.
Sin acercarse demasiado al debate por la reforma de la Justicia, pidió una Corte Suprema “cada vez más independiente”. Y avisó: “A cada agravio a lo largo de esta campaña, vamos a responder con una propuesta”. Curioso: fue la misma consigna que Cristina lanzó en el microestadio de Argentinos Juniors. A esta altura se volvió un lugar común.
Fuego
El mayor golpe del efecto del esperado acto fue el “compromiso de fuego” del Frente Renovador de no permitir que ningún legislador propio “trate ni la reforma de la Constitución Nacional ni la reelección indefinida”. El tigrense prometió que junto a sus candidatos firmarán esa promesa ante escribano público; si “eventualmente” alguno de ellos habilitara un debate de esas características, aseguró, deberá renunciar a su banca.
Pero Massa también reclamó “atacar” la inflación, a la que definió como un “cáncer” que avanza sobre el salario, los ahorros y el poder adquisitivo de las capas populares y la clase media. Tampoco se privó de hablar del Impuesto a las Ganancias, en el día en que el Sindicato de Camioneros de Hugo Moyano llevó adelante un nuevo paro nacional. Prometió reducir el mínimo no imponible y combatir el empleo en negro.
Mirando tierra adentro en el suelo bonaerense, propuso fiscalías descentralizadas e insistió con la policía comunal para todos los distritos. Cerró con un mensaje conciliador: “Construir sin destruir”. Un desafío de equilibrio que le será cada vez más difícil mantener a medida que avance la campaña.
En el escenario lo acompañaron los candidatos de los primeros diez lugares, Mirta Tundis, Felipe Solá, José Ignacio De Mendiguren, Soledad Martínez, Alberto Pérez, Sandro Guzmán, Gladys González, Héctor Daer, Gilberto Alegre y Azucena Echosor de Acuña. El ex gobernador Felipe Solá se negó a hacer declaraciones a NOVA.
Abajo estuvieron todos: el matrimonio Alberto Roberti-Mónica López; los intendentes massistas Gabriel Katopodis, Joaquín De la Torre, José Eseverri, Luis Andreotti y Martín Caso; los candidatos distritales Walter Scheffer (Ensenada) y Ángel Celi (Berisso); el armador y candidato a diputado Juan Amondarain -a quien se lo nota muy agrandado en Twitter-, y los actores Fabián Gianola (también candidato), Mariano Martínez, Osvaldo Laport y Victoria Onetto, entre muchos otros asistentes de la política, el espectáculo y el deporte.