En una tensa sesión extraordinaria del Concejo Deliberante de San Nicolás, los ediles aprobaron una declaración de emergencia hídrica y un pedido de interpelación al intendente Ismael Passaglia que se sometió dos veces a votación, siendo en segundo término rechazado.
En la previa del inicio de la sesión, vecinos inundados ingresaron al recinto tras romper una puerta, ante la negativa de las autoridades a permitirles el paso, y reclamaron la interpelación del jefe comunal, al que hacen principal responsable de la inundación que dejó un saldo de 6 mil evacuados.
El pedido de interpelación fue rechazado en un confuso episodio, porque en la primera votación la iniciativa fue aprobada, pero desde el oficialismo reclamaron realizarla nuevamente ante la situación extrema de estar sesionando con una multitud de vecinos protestando, lo que habría dificultado el recuento de votos.
En la segunda votación, llamativamente los números favorecieron al oficalismo y el pedido fue rechazado.
Eso hizo estallar en furia a los vecinos que prácticamente paralizaron la sesión con cánticos e insultos contra el jefe comunal y denuncias de algunos ediles de la oposición sobre la supuesta “compra” de votos durante esos minutos para evitar el pedido de interpelación.
Recordemos que la situación de crisis en el distrito derivó en una seria disputa entre el intendente y los funcionarios de María Eugenia Vidal encargados de las obras hidráulicas, que derivaron en un rápido enfriamiento de las relaciones, luego de meses de coqueteos y rumores de su designación como ministro de Salud en reemplazo de Zulma Ortiz.
Ahora el jefe comunal y su hijo Manuel Passaglia, son acusados de abandonar a los vecinos y oponerse a la apertura del terraplén que impedía que bajen las aguas, y que había sido recomendado por la Dirección de Hidráulica del Ministerio de Infraestructura.
Por si fuera poco, Passaglia brilló por su ausencia en la localidad de La Emilia, una de las más afectadas, y hasta la ministra Patricia Bullrich reclamó su presencia en declaraciones públicas.
Por el momento los inundados permanecen en el recinto del Concejo Deliberante y exigen la presencia del intendente, algo que los ediles parecen no estar dispuesto a conceder.
