Partiendo de la idea de que el trabajo es uno de los elementos que contribuye a la integración social, el diputado provincial de la UCR, Gustavo Vignali, lanzó una iniciativa tendiente a generar un avance en la consagración de los derechos de las personas con capacidades diferentes.
Se trata de un proyecto que persigue como objetivo la reforma de la Ley 10.205, particularmente en su artículos 3º y 16º, dado que el actual sistema de pensiones sociales demarca una incompatibilidad entre el recibir una pensión y acreditar un trabajo remunerado.
Por ende, dicha iniciativa establece un marco de superación a la legislación provincial vigente resaltando un aspecto clave para su modificación: la posibilidad de extender el derecho a recibir la pensión por invalidez a todas aquellas personas (mayores de 18 años) que tengan -como mínimo- un 66 % de su capacidad laboral reducida y ejerzan trabajos remunerados cuyo ingreso no supere el salario mínimo vital y móvil, ni posea recursos de cualquier índole que le produzcan ingresos iguales o mayores al señalado, ni cuente con bienes suficientes que -a juicio del organismo de aplicación- posibiliten la satisfacción de sus necesidades básicas de alimentación, vivienda, salud y esparcimiento o tenga parientes que se encuentren en condiciones de proporcionárselos (caso contrario la emisión de la pensión se suspendería automáticamente).
La modificación que propone el legislador mediante su proyecto de ley tiene que ver con reparar la desigualdad que se genera cuando una persona posee sus capacidades laborales reducidas. De esta manera, sugiere reducir el mínimo de edad de los beneficiarios (de 21 a 18 años) y reconsiderar que estas personas también puedan, paralelamente, ejercer actividades laborales.
Por ello, Vignali asegura que “la sanción de la reforma planteada constituiría un avance sustancial en la vida de aquellas personas que, recibiendo una pensión no contributiva de las características señaladas, podrían lanzarse a trabajar sin temor a perder su pensión y al encontrarse en condiciones de obtener un empleo en condiciones dignas”.
La idea realza su impulso en la necesidad de transformar una realidad social contribuyendo a garantizar condiciones de mayor igualdad, ampliando los derechos laborales de una enorme proporción de la población que -hoy por hoy- se encuentra en situación de desventaja y amerita mayor aceptación.
