El 12 de octubre la Municipalidad de San Antonio de Areco junto con la comunidad "conmemoramos el Día del Respeto a la Diversidad Cultural".

"Dia en el cual se puso en valor la inmensa variedad de culturas que han aportado y aportan a la construcción de nuestra identidad. Agradecemos a todas las escuelas de Duggan que organizaron este lindo acto", informaron. 

El Día del Respeto por la Diversidad Cultural es una fecha importante para reflexionar sobre la historia, la cultura de los pueblos originarios de América y las tensiones que aún hoy los atraviesan. Es una oportunidad para reconocer y respetar sus derechos, y para promover el diálogo intercultural.

En este día y particularmente en el contexto actual, es fundamental recordar que la diversidad cultural es una riqueza: una oportunidad para aprender de los demás y para construir un mundo más tolerante y plural.

Desde su institucionalización en 1917, la conmemoración del 12 de octubre ha estado rodeada de relatos históricos y representaciones diversas. A partir de 2010, el gobierno argentino cambió el nombre de esta conmemoración a Día del Respeto a la Diversidad Cultural. Esta modificación se realizó para promover una reflexión histórica sobre la llegada de los europeos a América, y para reconocer y respetar los derechos de los pueblos originarios.

El Día del Respeto a la Diversidad Cultural es una oportunidad para visibilizar y erradicar las diferentes formas de desigualdad y violencia social que enfrentan los pueblos originarios, afrodescendientes y migrantes. En este día es importante recordar que todos tenemos la responsabilidad de promover un mundo más justo y equitativo.

Resulta fundamental que el estado nacional y los estados provinciales respeten la constitución nacional que reconoce la preexistencia étnica y cultural de los pueblos originarios argentinos; que garantiza el respeto a su identidad y el derecho a una educación bilingüe e intercultural; que reconoce la personería jurídica de sus comunidades y la posesión y propiedad comunitaria de las tierras ancestrales que ocupan, y que asegura su participación en la gestión referida a sus recursos naturales y a los demás intereses que los afecten, comprendiendo su rol fundamental como defensores ambientales del territorio.