Fuente: Agencia NOVA:

Las elecciones PASO dejaron al descubierto que varios intendentes bonaerenses jugaron a dos puntas: de cara al kirchnerismo, pero por debajo con el massismo. En este polémico lugar, peses a las versiones encontradas, muchos ubican al ejecutivo municipal de San Nicolás, Ismael Passaglia.

Las elecciones del domingo no sólo agitaron las aguas, sino la poca estabilidad política interna de algunos distritos k, sobre todos aquellos en los que fueron derrotados por representantes locales del massismo. Los guarismos de las PASO pusieron en tela de juicio la lealtad de muchos jefes comunales que dudosos ante la postulación de Sergio Massa, habrían puesto huevos en todas las canastas. La jugada implicaba salir airoso ante la diversidad de resultados.

Los menos disimulados dieron el salto al costado, como efecto dominó, ante la postulación del tigrense y la seguidilla, cual escolta, de varios intendentes disconformes con la gestión kirchnerista. Otros, tras el abrigo de un posible triunfo de la oposición, tantearon terrenos, agilizaron conversaciones y tranzaron acuerdos para tener hombres en todos los frentes. Tanto fue el caos y la polémica post PASO, ante la posible huida a mansalva de intendentes K debido a los resultados, que el mandamás de Lanús, Darío Díaz Pérez, apresuró una evaluación general y aseguró que “no va a haber ninguna estampida de intendentes” de cara a las elecciones legislativas.

Es que la incertidumbre sobre el horizonte que elegirán quienes hoy juegan para Cristina Kirchner es el tema de agenda, dado que en el 38 por ciento de los municipios triunfaron las propuestas opositoras, y la ambivalencia política de muchos jefes comunales sólo despierta dudas.

Uno de los más cuestionados en las últimas horas, es quien comanda San Nicolás, Ismael Passaglia, donde la lista de precandidatos a concejal del Frente Renovador se impuso a la del Frente para la Victoria. Lo mismo sucedió a nivel nacional, ya que el Frente Renovador se impuso, en este caso por un punto en diputados nacionales. Sólo a nivel seccional, el FpV sacó ventaja, ya que el randazzista Andrés Quinteros, superó por cuatro puntos a Lisandro Bonelli. Sin embargo, las dudas sobre la decisión final que tomará el intendente Passaglia es bastante preocupante entre los kirchnerista, porque ha sido uno de los alcaldes que más se ha mostrado, sin estar formalmente en su espacio, con Sergio Massa.

Y pese a que en las últimas horas el candidato a senador Quinteros señaló que las versiones de fuga son operaciones del massismo, a las que calificó de “insólitas y absurdas” porque “no tiene asidero”, no son pocas las conjeturas en torno a un eventual viraje político del intendente Passaglia, nutridas por varias aristas. Entre ellas, resaltan las propias declaraciones del ejecutivo municipal, quien el lunes reconoció en diálogo con un medio local que el segundo lugar, en que se vio relegada su lista de concejales, se debió a un “arrastre” del “voto castigo” emitido contra el gobierno nacional.

Una tesis que no deja bien parado al oficialismo nacional, más teniendo en cuenta que el mismo Quinteros, antes de quitarle importancia a las versiones de “fuga”, señaló sobre esta posibilidad que “siempre que hay expresiones de moda, todo el mundo va tras esa moda y, desde allí, busca perpetrarse en los cargos. Nadie que migra en política, lo hace con un interés altruista por el bien común. Siempre es atado a un interés estrictamente electoralista y personal”.

Si ellos lo dicen, queda muy poco espacio para sacar otro tipo de conclusiones.